La visión somática se puede aplicar a cualquier método de practica de yoga: no se trata de otro estilo de yoga.

 

Se le da el nombre de Yoga Somático cuando se ve al cuerpo como la base corporal de todos los pensamientos, sensaciones y sentimientos  que nos da la experiencia de estar vivos como personas.

 

Se invita a una exploración personal, donde el observador es el sujeto de su propia investigación, por tanto,  el facilitador se interesa más con el proceso de la experiencia y ofrece al practicante maneras de escuchar las necesidades propias de su cuerpo,  en lugar de identificarse con las habilidades del cuerpo para lograr ciertas formas.  Por tanto, acepta las diferencias en las formas como posibilidades y se exploran como un mismo todo. Sin darle un juicio de correcto o incorrecto.

 

El Yoga Somático se interesa por la libertad que surge al  probar diferentes opciones y discernir cual es la mejor para nuestro momento, sabiendo que ese entendimiento surge de nuestra sensación interna.

 

A través de movimiento y asanas, respiración y sonido, se crean  conexiones en el cuerpo que integran nuestro SER.

 

Se utiliza el estudio de la anatomía vivencial, para sumergir al practicante  en la experiencia de sus sensaciones y sistema nervioso. No por el estudio del cuerpo como tal, sino simplemente como un mapa que nos inicia en un profundo viaje al territorio interior. Es simplemente un medio; para desde ahí,  habitar nuestro ser y actuar en la vida.

 

Yoga Somático se interesa meramente por la experiencia vivir conscientes y atentos de nosotros mismos y del mundo.

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